Milagros de la Virgen de la Piedrita


Por José Gabriel Ramírez Segura * Cronista

En la entrega pasada les relaté de como encontraron a la Virgen de la Piedrita, quien la encontró, y dónde se ubica actualmente.
Hoy tengo la dicha de relatarles los milagros de la Virgen plasmada en piedra.

PRIMER MILAGRO.
A Luis Higareda en su propia casa.

Luis tenia un árbol de naranjas en su jardín al entrar a su casa, un día decidió cortar algunas para prepararse un agua; Luis no se percato que en ese árbol estaba escondido un panal de avispas africanas (las avispas africanas están teñidas de un color entre negro y café con un veneno mortal, más dañino que el de una abeja).

Don Luis Higareda, en su casa del Rincón de San Andrés.


Luis, tranquilamente observó  las naranjas y con sus dos manos agarro tres, entre esas naranjas estaba el panal de avispas, el cual se lo trajo consigo al jalar el fruto; de pronto un zumbido lo alerto, miro cientos de avispas rodeándolo por todo el cuerpo incluso dentro de su boca; se quedo quieto. Pero, en medio de la desesperación replico dentro de sí.

-Virgencita de la piedrita cúbreme con tu manto, que ninguno de tus animalitos me haga daño.

Fue tanta su fe,  que poco a poco las avispas se fueron retirando y Luis respiró profundamente, sano y salvo, sin ningún piquete.

SEGUNDO MILAGRO.
A Silvia  Higareda, hija de Don Luis Higareda.

Silvia nos narra que un día ella y su esposo Felipe iban a  salir fuera a Estados Unidos, en el año 2023.
Tenían casi todo listo, pero a Silvia, se le olvido alistar las visas de cada uno con anticipación; por que ella estaba segura del lugar donde las tenia.
Cuando Silvia empezó a organizar su documentación, no encontró la visa de su esposo; le ayudaron a buscarla también sus hijas y su papá don Luis por toda la casa.
Al no encontrarla, por ningún lado de la casa Silvia acude con desesperación a la  Virgen de la piedrita y replico:

“Virgencita de la piedrita ¿por que me haces renegar? ponme donde la visa pueda encontrar “

Silvia ya estaba desesperada por que faltaba poco tiempo para que pasaran por ellos para llevarlos al aeropuerto de la ciudad de Guadalajara.
Al verla desesperada su hija Karina le dijo:
-Busca de nuevo en el cuarto de mi Bis, arriba del ropero, del buro, de todos lados, tal vez ahí este.
Silvia hizo lo que su hija le dijo y con mucha fé repitiendo Virgen de la piedrita iluminame; relatan que como por arte de magia apareció ahí arriba de uno de los roperos.

TERCER MILAGRO.
A Sobrina de Don Luis.


Silvia relata que a su prima, ya le habían realizado diferentes estudios en la Ciudad de México y en Estados Unidos, por que no podía caminar.
En una ocasión que su sobrina visitó a don Luis en uno de sus viajes a Estados Unidos, él le contó la historia que tenia con Virgen, por lo tanto sus sobrinas le pidieron con mucha devoción a la Virgencita que la hiciera caminar.
La fé de estas hermanas trascendió fronteras, y le prometieron que si la hacia caminar ellas la visitarían en persona.
Así fue, la sobrina de Don Luis caminó y visitó a la Virgencita, en agradecimiento le compro dos cajas de veladoras.
 
Estos son algunos de los milagros que se tienen conocimiento que ha hecho la Virgen plasmada en piedra. Esperamos más testimonios, ya que antes de llegar a don Luis la Virgencita estuvo en la comunidad vecina de la Flor del Agua, por un periodo de tiempo largo, aproximadamente 60 años.
Seguimos agradeciendo a la familia de Don Luis Higareda, a su hijo Oscar, a su hija Silvia, sus nietas Monica y Karina, por permitirme compartir estos bonitos relatos, esperando que más personas conozcan a la Virgen de la Piedrita, para que no pierdan la fe de que los milagros existen.  
Culminando este relato, les dejo un dato curioso de Don Luis Higareda; padeció una enfermedad llamada Escoliosis Degenerativa Lumbar; una enfermedad que genera cargas asimétricas en un segmento espinal y consecuentemente en la columna lumbar y se manifiesta en una deformidad tridimensional, es decir,  la deformidad de su columna no coincidía con el ritmo de vida que llevaba Don Luis, ya que la padeció aproximadamente 55 años. Es por eso, que tambien los familiares nos narran  este fragmento de su vida. En una de sus citas medicas le dijeron que se le había terminado el liquido articular de las rodillas, por lo tanto no podía moverse. 
Con esta situación; dos personas llegaron a su domicilio, doña Olivia atendía su pequeña tienda de abarrotes, estas personas le dijeron:
– Señora cierre su tienda, venimos a hacerle una oración para que tu esposo mejore.
Olivia colocó unas tablas con las que cerraba su tienda.
– Luis, venimos a hacerte una oración para que te ayudes. Le dijeron.
Luis entre sus dolores, y por cortesía; acepto.
Luis lo contada de la siguiente manera a su familia:
-A mi vida llegaron dos ángeles, me acostaron en la cama y me dijeron que me harían una oración para que me ayudara, al inicio no creí, pensé que estaban locos; pero el loco era yo, cerré los ojos y comenzaron a rezar una oración muy bonita; al cerrar los ojos vi un sepulcro y pensé, a caray me voy a morir, ya viene mi muerte, me vi acostado en ese sepulcro, vi que llego una persona como Dios nuestro señor, y me puso las manos en la columna; a partir de ahí, me levante caminando. Yo platique con Dios y le dije si quieres que te siga enséñame, sé mi maestro, quiero que me des un centro bíblico, tu me enseñaras a leer tu palabra.
Así fue, tenia sus centros de oración en las comunidades de la Barranca del Aguacate, la Flor del Agua, el Rincón de San Andrés y en la Parroquia de Guadalupe.
Además, sin importar su enfermedad y que sus músculos tensos; sobaba a personas de las anginas, sin costo alguno; solo les decía:
-Hagan una oración por mí.

Don Luis; fue un ser humano de fé, y de servicio a su projimo.

EL AUTOR de este relato cuenta con 10 años de edad y esta concluyendo su educación primaria. Es cronista de Sahuayo y miembro de la SMHAG y de la Asociación de Cronistas Jalisco Michoacán.

Sale a la luz pública Crónicas de Sahuayo III y será presentado este mes de noviembre.

Juan Bruno Hernández *Colaborador

Gracias a la iniciativa del C. Presidente Municipal de Sahuayo,  el Dr. Manuel Gálvez Sánchez, sale a la luz pública el tercer volumen de Crónicas de Sahuayo, coordinado por el maestro Francisco Gabriel Montes Ayala, nuestro director de esta revista electrónica, cronista de Villamar, Venustiano Carranza y coordinador del Consejo de la Crónica de Sahuayo, presidente de la Asociación de Cronistas Jalisco-Michoacán.

El tomo tres de la serie, será presentado el 25 de noviembre en Caballeros de Colón en Sahuayo, ante la sociedad sahuayese y los amantes de la historia y la crónica.

Cabe destacarse que van tres volúmenes que le han dado a Sahuayo importantes aportes a su microhistoria, de esa pequeña parte de la historia nacional que no se sabe mucho. El rescate histórico coordinado por el maestro Francisco Gabriel Montes, ha sido excelente, al reunir a un grupo de jóvenes que se están formando en estas lides de la historia y la crónica. Santiago Manzo Gómez, Helena López Alcaraz ( que por cierto es colaboradora de la revista de Crónicas de la Ciénega) así como también José de Jesús Girarte ( JJ), Ana Karen Ramírez Sánchez, Francisco Jesús Montes Vázquez, Miguel Ceja Sandoval, los cronistas José Castellanos Higareda de Pajacuarán, Salvador Meza Carrazco de Jiquilpan y Hugo de Jesús Gómez, que merece una mención especial ya que al formarse el tercer tomo de Crónicas de Sahuayo, siendo estudiante del doctorado en Historia en la UdeG, fue muerto en un asalto frustrado. Hugo era sin duda alguna, uno de los cronistas de Sahuayo más destacados a su corta edad, que sin duda su partida enluta este tercer tomo.

El contenido de esta nueva publicación versa sobre la cristiada en Sahuayo, donde se presentan varios artículos de este periodo histórico, que hoy se reivindica en esta zona.

El volumen III trae desde documentos inéditos, fotografías y narraciones extraordinarias que no se conocían. Se destaca también, la lista de cristeros que participaron en la guerra en esta zona, así como sacerdotes y mujeres que fueron parte fundamental en la lucha por la defensa de la fe.

Esperamos con ansias el día de la publicación, informando a nuestros lectores, que el libro será obsequiado el día de la presentación, para que estén atentos para llevarse un ejemplar a casa.

También es justo reconocerle al presidente Manuel Gálvez, su compromiso de rescate histórico de su tierra natal Sahuayo.

De las extintas comunidades indígenas: Santiago Sahuayo II

Francisco Gabriel Montes Ayala *Academia Nacional de la Crónica

En este alegato al que aludimos, los indígenas sahuayenses exigen que el administrador de Guaracha don Pedro de Guardiola y Chávez  se presente ante el juez a “que con toda claridad y señas diga sus linderos poniendo mojoneras a donde fuere necesario”.

Efectivamente en la foja 19 aparece la notificación y luego la citación mencionada en que comparece Guardiola, iniciando así la lista de testimonios vertidos por los testigos presentados de una y otra parte.

El primer testigo se presentó el 18 de mayo de 1758 un tal Juan de Alcázar vecino de la hacienda de La Palma, luego Juan José Bautista mulato libre de Sahuayo y Juan Antonio de Torres español del mismo pueblo, luego de las declaraciones se fijó la fecha para hacer la vista de ojos de los linderos, para lo cual una pléyade de españoles y dueños de estancias se dieron cita el lunes 22 de mayo para ello.

En la foja 22 v y 23 aparece el documento en le que sirvieron de testigos el cura sahuayense don Juan Ruiz de Aragón,  don Pedro de Guardiola, don Ignacio García, don Gaspar Gutiérrez de Robles y don Diego Cárcamo, común y naturales del pueblo iniciando su vista de ojos en el paso de Carretas “que está en el arroyo que llaman de Zaguayo y puestos en él comenzaron a reconocer guiados por los testigos ; línea recta para el sur por sobre el camino que de dicho paso sale para el pueblo de Xiquilpa, que llaman carretero ; y a poca distancia toparon con un corral de madera que está de cuenta de Guaracha…dijo el administrador era de la Hacienda y reclamándole el Sr. Cura y los naturales que en aquella esquina estaba introducida la dicha hacienda…”

Publicado en 1995

Copyright@Francisco Gabriel Montes, México 2020

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El señor «Ceremonio» el cronista gráfico de Pajacuarán en Michoacán

Francisco Gabriel Montes Ayala *Academia Nacional de la Crónica, A.C.

El Señor «Ceremonio», bien aplicado el apodo al cronista gráfico de la lente, don Gerardo López Magdaleno, por su carácter servicial, por su trato ceremonioso con la gente, su lealtad, su respeto a los demás, su honestidad, su caballerosidad y su religiosidad… así lo dice quienes lo conocimos, lo decimos todos; así era Gera; lo conocí por allá en la década de los noventa, cuando pasaba por Pajacuarán en mis tiempos de reportero de MENSAJE de Zamora y visitaba a José Castellanos, el poeta y cronista del lugar; nos identificamos porque cuando Gera anduvo por Estados Unidos, allá conoció a mi tío José Santos Montes en Chicago, Ill., y desde aquellos años de principios de los noventa hicimos una sólida amistad, que hasta el último día conservamos.

Hijo de don Pablo López, y de doña Eloisa Magdaleno, Gerardo, anduvo como todo joven en los deportes, de aqui para allá, de una ciudad a otra y del país del norte a este. Pero su afición por la fotografía, lo llevó siempre a comprar el último modelo de las cámaras mecánicas, primero, luego de las digitales. Por allá en tiempos del presidente Jaime Ochoa Vaca, el cronista de Pajacuarán, José Castellanos, amigo entreañable de él, lo animó a que presentara una obra inédita de fotografía de flores del campo, principalmente del cerro pajacuarense, de ese enorme y bello basáltico que le gustaba andar y desandar y eso detonó su afición para brincar a la profesión de fotógrafo; así los últimos treintas y tantos años, llenó sus archivos con fotografías de Pajacuarán y de la vida social de los pajacuarenses, de la cultura, de los deportes, de la vida religiosa etc.

Gera se preocupó por el rescate histórico de su tierra natal, cuando sacó de aquí y de allá, digitalizando y mejorando en mucho, las deterioradas fotografías, que desde 1917 hasta los años setenta recopiló, y mostró a todos los paisajes del antiguo Pajacuarán; nos permitió, en el caso mío y de otros autores ilustrar con ellas nuestros trabajos; le sacó hasta el mil por ciento de ventaja a las redes sociales, decía «que no le cobraban y no cobraba» por trasmitir la cultura de su pueblo y los eventos de la sociedad» y quienes queremos a ese pueblo bellísimo y sus costumbres, con Gera trasmitiendo, se llenaba el corazón de alegría, sabías de todo lo que sucedía en aquella población.

Hoy la vida nos quita a uno de los invaluables ciudadanos de aquel pueblo, un cronista gráfico, que nunca quiso pertenecer a nuestra agrupación por la humildad que lo caracterizaba, que se reía y decía siempre que le insinué, «Francisco Gabriel, yo no dejo de ser solo un aficionado a la fotografía, no muchas gracias» hoy solo queda darle un reconocimiento al buen amigo y buen cronista pajacuarense. Vaya un abrazo amigo donde estés. Hasta luego. Hasta siempre. Y a sus hijos un fuerte abrazo para, Pablo y Gerardo.